El poliamor es considerado como el término que contempla verdaderas relaciones amorosas, no solo sexuales, más allá de la pareja, afirma el sexólogo Miguel Vagalume, activista en pro de la no monogamia y portavoz del colectivo Golfxs con principios en España.
“Nosotros no tenemos problemas con la monogamia, sino con el pensamiento monógamo, que no es lo mismo. Por ejemplo, contemplamos la posibilidad de que alguien elija estar con una persona de forma monógama si eso es lo que apetece, pero siempre teniendo en cuenta que las cosas podrían ser de otra manera”, explica el especialista.
Destaca que muchas veces los seres humanos pueden sentir desde una mera atracción sexual a complejos sentimientos afectivos por otras personas más allá de la pareja y que una sola persona no tiene por qué cubrir todas las necesidades de otra durante toda su vida.
Asegura que los no monógamos predican la honestidad y la aceptación de nuestros deseos naturales por lo que si sentimos algo hacia otras personas, lo primero es contarlo y no mantenerlo como un sonrojante secreto.
Y es que considera que compartir el sexo o el amor con terceros no tiene por qué llevar a la destrucción de la pareja, sino que puede contribuir a consolidarla o incluso a transformarla en una relación poliamorosa.
Afirma que no es del todo cierto que vivamos en una sociedad monógama y destaca que un estudio realizado en España por el Instituto Ipsos, en 2014, arrojó que el 35 por ciento de los hombres y el 26 por ciento de las mujeres había sido alguna vez infiel.
No obstante, reconoce que la infidelidad sea descubierta o no implica mantener secretos, engañar, faltar al respeto, mentir a la que tal vez es la persona más importante de nuestras vidas y el alto precio que muchas veces se paga es la ruptura o el divorcio.
En tanto que para los no monógamos, menciona que la infidelidad es una prueba de la poca funcionalidad del modelo de la pareja tradicional y el amor romántico, fuertemente enraizado hasta en los productos culturales como películas, canciones pop u óperas.
Fuente: El País/doh/Foto: archivo
