El gasto social del gobierno solo sirve para generar clientelismo político, ya que las personas beneficiadas son utilizadas para elecciones, afirmó el economista Luis Pazos.
"Como se ha hecho en el campo mexicano en donde hay ungran gasto social y queda en los líderes, queda en los políticos y para lo único que sirve es para llevar acarreados, a gente pobre, dándole una miseria y creando grandes gastos".
¿Usted no cree en el gasto social o por qué lo critica en su libro?
"No es cuestión de creer, es cuestión, como dicen desde el punto de visto académico, de empírica, de evidencia".
En entrevista con XEU sobre su nuevo libro "Justicia Social Injusta", indicó que existen estadísticas en donde se demuestra que son más quienes viven del gasto social, que quienes lo producen.
Sostuvo que un país no puede avanzar cuando la mayoría de la población vive del Estado y pocos producen, porque son menos los que viven de los impuestos que los que los producen.
"El que dice que el gasto social va a resolver los problemas que me diga en qué país dónde el gasto social ha resuelto los problemas".
Como ejemplo, citó, que en nuestro país, durante la administración federal anterior se incrementó el gasto social y no resolvió problemas, al contrario, aumentó el número de pobres.
Lo que funciona, subrayó, es que haya justicia, seguridad y que se respete la propiedad.
Recordó que la reforma agraria solo originó cordones de pobreza en las ciudades, migración de millones de campesinos hacia Estados Unidos.
"Desgraciadamente son recursos, más que dinero, son recursos, porque es riqueza perdida, qué sucede, pues que se lo roban, en nuestro estado es un hecho".
También, el entrevistado agregó que suena "atractivo" decir que la pobreza se va a terminar "si le quitan a los que tienen y le dan a los que no tienen", algo que tiene serias repercusiones.
"En este libro demuestro que la llamada justicia social, que es quitarle a unos para darle a los que no tienen, va en contra de la justicia, y que eso ha servido para que los gobernantes justifiquen el quitarle a unos para darles a otros".
Ante ese panorama llega el momento en el que la gente quiere estar entre los que reciben y no entre los que producen y generan riqueza.
Además, se refirió a la intención de "prostituir la Constitución", una práctica común entre gobernantes de América Latina, que tiene como objetivo arrojar un poder ilimitado.
"Entonces la Constitución deja de ser Constitución; la Constitución nace para oponerse a los gobiernos absolutistas como el de Luis XIV, que decía 'el Estado soy yo', y ahorita hay muchos gobernantes que quieren decir 'el Estado soy yo' como hizo Hugo Chávez".
